· Llevar ropa cómoda y fresca, sin llegar a prescindir de prendas, y mucho menos a conducir con chanclas o descalzo.
· Buena hidratación, con la calor es fundamental, lo mejor es tomar agua y que esté fresca, mucho mejor que los refrescos porque hidrata muchísimo más.
· Circular con el habitáculo fresco y bien ventilado. Intenta renovar el aire del interior, recalentado, cuando antes, y aprovecha para enfriar el climatizador.
· Realiza pausas regulares, para cada cierto tiempo, refréscate, intenta dejar el coche a la sombra.
· Si vas a salir de viaje, madruga. Sal con la fresca, porque notarás mucho la diferencia, tendrás tres o cuatro horas en las que no sufrirá nadie los rigores de sol directo.
· Utiliza el parasol, es una herramienta fundamental para quitar grados al interior del coche y, muy importante, no quemarte las manos o las posaderas cuando entres al coche.
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